Cuenta la leyenda que un día doña Verdad y doña Mentira se cruzaron...
- Buen día - dijo doña Mentira
- Buenos días - dijo doña Verdad
- Hermoso día - dijo doña Mentira
Y entonces doña Verdad se asomó para ver si era cierto.
Lo era.
- Hermoso día - dijo entonces doña Verdad
- Aún más hermoso está el lago - dijo doña Mentira
Y la Verdad miró hacia el lago y vio que la Mentira decía la verdad y asintió
Corrió la mentira hacia el agua y dijo:
- El agua está aún más hermosa. ¡Nademos!
La Verdad tocó el agua con sus dedos y, realmente estaba hermosa y, entonces confió en la Mentira.
Ambas se sacaron las ropas y nadaron tranquilas.
Un rato después salió doña Mentira, se vistió con las ropas de doña Verdad y se fue.
La Verdad, incapaz de vestirse con las ropas de la Mentira, comenzó a caminar sin ropa y todos se horrorizaban al verla.
Es así como aún hoy la gente prefiere aceptar a la Mentira disfrazada de Verdad y no a la Verdad desnuda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario