¡¡Qué bien sientan unas buenas vacaciones!!

Aunque éstas sean cortas y después las pases en casa yendo a la playa más cercana
o paseando por tu ciudad. 

Y, es que eso mismo he estado haciendo durante mi ausencia. 

Sienta bien desconectar de todo y respirar aires distintos de vez en cuando. 

Reducir las horas sentada frente al pc y dedicarlas a la lectura de un buen libro en la playa, en una terracita disfrutando de una cerveza bien fresquita o en la piscina con mis sobrinos cogiendo colorcito, que falta me hacía, pues ya me fusionaba con el blanco de la pared, je je.

En el último post aun quedaron algunos cabos sueltos con respecto al proyecto Víbora II, los murales estaban casi terminados pero aun faltaban por pintar las cabezas de la serpiente, la culminación del proyecto, pero hubieron varios incidentes mientras se hacían. Vándalos hay en todas partes. Y se han retrasado. Ya subiré alguna fotico de ellas.

 Bueno, en realidad de vacaciones, por desgracia, estoy desde hace mucho tiempo por falta de trabajo (como muchos otros españoles) pero éstas he estado unos días fuera de Elche con unos amigos, después eso sí, de haber disfrutado las fiestas de aquí a tope. Visitando Córdoba. Aunque hay quien me ha dicho que estamos locos, por visitar esta tierra en estas fechas ¡¡con la que está cayendo!!

Pues, sí, un poco locos si que estamos, les doy la razón, pero las circunstancias se han dado así y las hemos aprovechado. A pesar del calor lo hemos pasado muy bien.
He visitado una tierra que nunca antes había estado, pues es la primera vez
que piso Andalucía a pesar de tenerla tan cerquita. 

Lucena, el pueblo donde nos hospedamos, pues allí vive un amigo al cual fuimos a visitar y pasar un fin de semana con él; ese mismo día visitamos Antequera y estuvimos en el Paraje Natural de El Torcal De Antequera, una de las muestras más impresionantes de paisaje kárstico de toda Europa.

Sencillamente alucinante lo que la naturaleza puede llegar a crear, de visita obligatoria si pasas por allí. Hicimos una de sus rutas, una de las dos sendas a través de su encanto, donde nos íbamos parando a cada rato a admirar tanta belleza. 

Consejo: Ropa cómoda, cámara de fotos, palos para andar y, sobre todo, agua (esto último no nos faltó en todo el fin de semana)

Cuidado con los Cardos, abundan mucho por allí y tienen unas pinchas muy largas.

http://turismo.antequera.es/place/paraje-natural-de-el-torcal/

Al día siguiente, como no podía ser menos, y tras descansar bien del viaje y las andanzas del día anterior, estuvimos en Córdoba Capital visitando su zona céntrica.
Nuestra primera parada fue la Mezquita Catedral de Córdoba que es el monumento más importante de todo el Occidente islámico y uno de los más asombrosos del mundo. Donde predominan una combinación de estilos gótico, renacentista y barroco.
Siempre había visto fotografías, imágenes en documentales... pero nada comparado
como con verlo in situ para admirar esta obra, creación del ser humano.
Es impresionante, la grandeza de semejante templo.
 Visita virtual: http://www.catedraldecordoba.es/visita/index.html

En nuestro paso por Córdoba quedamos maravillados con sus Patios tan llenos de coloridos
cada cual más impresionante y bonito, nos dejaron con la boca abierta.
¡¡Realmente preciosos!!
 El Río, la Puerta del Puente, el mismo Puente Romano de Córdoba y la Casa Andalusí.
http://www.lacasaandalusi.com/

Nos faltó día y fuerzas para seguir visitando la ciudad y nos quedamos con ganas de más, finalmente acabamos la tarde descansando y tomando unos tes y unas pastas en una tetería en el casco histórico de la ciudad. Terminamos rendidos pero con ganas de volver más adelante y seguir disfrutando de los misterios que esconde Córdoba.

El domingo, último día de nuestro viaje, nos lo tomamos con más calma.
Al medio día visitamos Priego de Córdoba, qué decir de lo poco que pudimos ver allí, otro sitio encantador, con un mirador espectacular y paseando por su callecitas estrechas blancas y decoradas de flores antes de llegar a él, es como un pequeño laberinto hasta encontrar aquel gran abismo con vistas al infinito. Realmente impresionante.
Nuestra última parada en Priego de Córdoba fue en la Fuente del Rey y la Fuente de la Salud muy recomendables de visitar si pasáis por allí. Se nos echó la hora encima y no pudimos ver más,
por desgracia, así que comimos allí.
Y vuelta a casa.
Aunque corto, fue intenso y mereció la pena.
Más adelante, si se puede, volveremos.